La Costa Galega es la gran protagonista de esta ruta en cuyo final se encuentra Santiago de Compostela, famosa por ser el destino del Camino de Santiago.
La visita al Faro de Estaca de Bares, y el Faro de Finisterre puntos más al norte y oeste de la península, hacen que esta ruta sea un poco mágica.
Comenzamos esta larga etapa cuya distancia se ve compensada por la ausencia de curvas, a pesar de que prácticamente durante toda la ruta circularemos siguiendo la linea de la Costa Galega.
Así pues, reseteamos el odómetro de la moto y salimos de este pequeño y encantador pueblo costero donde hemos pasado la noche, como es Foz, en la provincia de Lugo por la N-642, dirección Norte y siguiendo el trazado de la costa.
Dejamos atrás la pequeña población de Vilachá y poco después, tras pasar Burela, hacemos un giro al oeste donde terminaremos el tramo continuando en linea recta.
Sin darnos cuenta hemos cambiado de carretera y circulamos ahora por la LU-862. Al ser una autonómica de primer nivel, es bastante ancha y esta en concreto no tiene muchas curvas, al menos hasta pasada la población costera de Celeiro, donde haremos un giro al sur y otro al norte, para salvar un golfo con una playa.
Poco antes, pasado el PK 93 se puede coger un desvío para acceder al Mirador de Monte Faro, un lugar elevado con muy buenas vistas de la Costa.
Continuamos la línea de la costa hasta que tras cruzar un puente sobre el Río Sor, entramos en la pronvincia de A Coruña.
La primera localidad que nos encontramos en la esta nueva provincia Galega es Porto do Barqueiro, un pequeño pueblo pesquero que debe su nombre al tradicional barquero que cruzaba la ría, hasta la construcción del puente metálico en 1901.
No hemos resistir la tentación de desviarnos un poco de la ruta para visitar el punto más al norte de la península ibérica situado en el Faro de Estaca de Bares, un lugar mágico y tranquilo al que accedemos desde Porto do Barqueiro y que se encuentra tan solo a 7 km.
Volvemos por nuestros pasos hasta Porto do Barqueiro para continuar ruta, a cierta distancia de la costa hasta que nos volvemos a encontrar con el Cantábrico al cruzar el río Baleo por un estrecho puente. Este río nos acompañará prácticamente hasta el final del tramo, que finaliza cuando llevamos recorridos 86 km.
Hemos cambiado a una vía naranja, y circulamos por ella a través de una serie de curvas abiertas en zig zag para encontrarnos nuevamente con el mar cuando llegamos a Cedeira. Nos adentramos en esta población y al muy cerca de la costa rodeamos a una rotonda con una farola de 8 bombillas, u continuamos dirección sur.
Dejando atrás Cedeiro por 4 km, cruzamos el Río Das Mestas dirección Ferrol, cuando llegamos a Campeiras, justo antes de cambiar de carretera, finalizando así el tramo en una rotonda donde giraremos a la derecha, dirección Ferrol.
La rotonda en la que hemos cambiado de carretera nos dirige más hacia la costa aunque no veremos el mar en este tramo compuesto por varias rectas donde en ningún momento dejaremos de ver rastros de civilización, compuestos edificaciones que a vista de pájaro están dispuestas de forma anárquica,
Tras rodar 11 km por esta autonómica de segundo nivel bien asfaltada, giramos a la izquierda dirección a Mandía.
Nos encontramos ahora en el tramo 6 y hasta el 11 hay que prestar mucha atención pues son tramos muy cortos, de apenas 1 km. Este en cuestión esta compuesto por una recta en cuyo final y tras una curva a la izquierda, llegaremos a un cruce en forma de cruz. Aunque tenemos preferencia, prestamos atención y continuamos recto.
Nos ha llamado la atención que el PK situado en este cruce marca kilómetros y metros, concrétamente 3,20.
El asfalto de este cortísimo tramo se ha estrechado notáblemente, midiendo más o menos unos tres metros y nos llama la atención una marquesina azul del Banco Pastor que más que una marquesina parece el banquillo de un campo de futbol.
Un par de pequeñas curvas después, llegamos a Mandiá final del tramo en un cruce junto a otra marquesina, esta vez más habitual donde continuamos también recto.
Continuamos por otro kilómetro más en cuya parte final y tras una pequeña subida con una curva a la derecha llegamos al final del tramo en un cruce en forma de T donde giraremos a la derecha dirección a Covas, tras en correspondiente Stop.
Nos adentramos ahora en una zona poblada de árboles mientras rodamos por el pie de una pequeña montaña, más bien montículo, cuando llegamos a Raxón y poco después a Pedreira en cuyo casco urbano compuesto por varias casas muy separadas entre sí y tras pasar el PK 9 terminamos este tramo.en un giro a la izquierda.
Abordamos ahora el tramo más corto de la etapa, de tan solo 400 m de longitud compuesto por un recto y estrecho asfalto, en cuyo final giraremos a la izquierda. Si recorres esta ruta en verano, en vez de girar, puedes avanzar solo unos metros y darte un chapuzón en la playa de Pedreira, donde nos encontramos ahora.
Seguimos en la Costa Galega, todavía en el Cantábrico, y prácticamente los 3,5 km de este tramo que discurre por la DP-3606 los haremos a lo largo de la playa de San Joge. una encantadora playa que se encuentra en estado semi salvaje, debido al viento que sopla a menudo.
Dejamos por un momento el trazado de costa cuando llegamos a Claudina donde giraremos a la izquierda justo en el PK 3,90
Pasado el tramo 11 y tras unas curvas, giramos hacia el Este donde poco después pasamos bajo un viaducto de la N-655 cuando un cartel nos anuncia una rotonda en la que debemos tomar dirección a A Malata.
La presencia de casas que a medida que avanzamos aumenta en número, delata la cercanía de una gran ciudad, en este caso Ferrol, ciudad a la que accedemos por su parte oeste en una gran curva abierta con el mar a la derecha y un complejo deportivo a la izquierda.
Tras cruzar esta gran urbe, salimos de ella por la FE-14 cruzando un gran puente que cruza la Ría de Ferrol, formado por una gran curva a la derecha. Al otro lado del puente llegamos a Fene, donde cambiaremos de carretera.
Circulando ahora por la N-651, en Fene, giramos hacia el sur para cruzar la Ría de Ares después de haber pasado por Cabanas.
Al otro lado del puente accedemos a Pontedeume donde continuamos ruta para hacer dos grandes y rápidas paellas al final de las cuales se encuentra Cruceriro.
10 kilómetros después abandonamos esta carretera nacional en un desvío a la derecha incoporándonos a la AC-164.
Comenzamos este tramo de 4 km cruzando la Ría de Betanzos por un puente más estrecho que los anteriores, señal de que el paisaje se va volviendo más rural.
Dos grandes curvas a derecha e izquierda respectívamente, esta última con vistas al mar y una recta de 1 km, nos llevan a una rotonda en la población de Cario donde abandonaremos esta vía de nomenclatura verde, dirección a Sada.
En sentido norte nos dirigimos ahora hacia la población turística y pesquera de Sada, a la que accedemos tras rodar 4 km por un trazado más bien recto.
Al pasar junto a la playa de Sada, podemos divisar de frente, la playa de Miño, localidad por la que acabamos de pasar.
Con casi la mitad de la ruta recorrida y siendo ya mediodía, decidimos hacer una parada para comer, pero para este fin, nos gustan más los pequeños pueblos costeros que las grandes ciudades, así que decidimos continuar unos kilómetros más y llenar el estomago en la bonita playa de Mera, de arena blanca perteneciente al Concello de Oleiros.
Con el estómago lleno, abordamos la segunda mitad de la ruta con A Coruña como destino de este tramo, donde llegaremos tras rodar 10 km en dirección sur oeste cruzando un puente en cuya parte inicial se encuentra Perillo también perteneciente al Concello de Oleiros.
Nada más cruzar el puente, un gran cartel nos anuncia la cercanía del desvío que debemos tomar para salir de esta ciudad en la que apenas hemos entrado.
Teniendo la certeza de que algún día volveremos a visitar A Coruña con más calma, tomamos en el segundo desvío direccion a Santiago y Palavea incorporándonos así a la N-550.
Durante el principio de este tramo cruzamos varias poblaciones absorbidas por la capital Galega, así que más vale rodar a velocidad de travesía.
Dirección sur, en una gran recta, la N-550 se ha transformado en este tramo en una especie de gran avenida, por la que cruzaremos la AP-9 por un corto viaducto, hasta que muy cerca del aeropuerto de A-Coruña abandonamos esta vía nacional en un leve ascenso dirección a Culleredo
Habiendo salido definitívamente de una gran ciudad, las casas en esta zona son mucho más bajas, la mayoría unifamiliares cuando llegamos a Fontemaior, situada al lado del aeropuerto.
Cruzamos la AC-14 por un paso elevado tras el cual se encuentra una rotonda en la que cogeremos la segunda salida y continuamos 1 km más, para acceder a otra rotonda situada sobre la A-6 en la que seguiremos recto dirección a Mesón de Vento, Cardeda y Sta Conba cambiando de carretera y por consiguiente, de tramo.
Los próximos 7 km los rodamos por la AC-523, ancha, recta y bien asfaltada, cuando pasado el PK 7, un cartel nos informa la proximidad del desvío que debemos tomar dirección a Laracha y Carballo.
Tras haber hecho una oreja con su correspondiente Stop, iniciamos este nuevo tramo donde debemos tener mucho cuidado pues después de la primera curva y tras haber recorrido solo 270 metros, la carretera se divide en dos justo frente a una cantera. Aquí debemos continuar dirección Laracha y Carballo.
A partir de aquí, la carretera se estrecha bastante, desapareciendo la señalización horizontal. Hemos vuelto a las secundarias que tanto nos gustan.
Admirando el paisaje abierto compuesto por verdes campos poblados de árboles de mediana altura, accedemos a A Laracha.
Circulamos ahora por la AC-552 para llegar a Carballo en dirección sur oeste. Los 11 kilómetros que separan A Laracha de Carballo, de paisaje abierto y muy verde los haremos en unos 8 minutos ya que el asfalto de este rápido tramo esta en muy buen estado y tampoco tiene curvas de relevancia.
Una vez en Carballo, continuamos en linea recta hasta que nos encontramos con una farmacia situada en un edificio aislado de tres plantas. Justo allí giraremos a la derecha dirección a Fisterra, Cee, Bruño, Malpica y Ponteceso
Avanzamos ahora por este corto tramo de tan solo 2 km de longitud hasta que llegamos a una rotonda en la que continuaremos recto dirección a Buño, Malpica y Ponteceso.
Desde esta rotonda ya se divisa la siguiente rotonda en la que tomaremos la segunda salida en dirección a las mismas poblaciones.
La AC-418 por la que circulamos ahora, no se diferencia mucho de la anterior carretera que nos ha traído hasta aquí. Sigue siendo recta y bien asfaltada. Justo en el PK 9, llegamos a una rotonda donde tomaremos la cuarta salida dirección a Ponteceso
Buscando nuevamente el mar, nos dirigimos ahora a Ponteceso, localidad costera a la que llegaremos tras 11 km de recto y buen asfalto.
Cruzamos el Río Allones y cambiamos de carretera comenzando un nuevo tramo.
Huele a mar en este tramo que discurre paralelo al Río Allones que cada vez se ensancha más debido a la proximidad de su desembocadura y que podemos ver por la derecha.
Llegamos a As Grelas donde giraremos a la izquierda en un ceda el paso.
En el comienzo de este tramo de 8 km, nos encontramos con unas curvas abiertas y rápidas y una recta de poco más de 2 km nos acerca a dos rotondas que dan acceso a la AG-55 construida recientemente para agilizar el tráfico de la zona.
Pasamos por ambas rotondas continuando en linea recta para poco después acceder a Baio Grande, donde giraremos a la derecha firección a Fisterra.
Un cartel verde nos anuncia que acabamos de entrar en el Concello de Vimianzo.
Dejamos por un momento los tramos cortos y nos disponemos a circurlar por esta ancha y bien asfaltada autonómica de segundo nivel en dirección sur.
Dentro de los límites legales, apretamos lo más posible el acelerador y disfrutando del ancho trazado y las curvas abiertas, llegamos a una rotonda en cuya segunda salida, un cartel nos anuncia Fisterra.
Iniciamos esta gran ruta desde el punto más al Este de la Península Ibérica y en esta misma etapa hemos estado en el punto más al norte. Así que consideramos una cita obligada visitar El Cabo de Finisterre, el punto situado más a Oeste, así que hacia allá vamos.
Tras un ascenso en el que salvamos un desnivel de 100 metros en 2,5 km, comenzamos el descenso hacia Sardiñeiro de Abajo.
Al fondo, unas bonitas vistas del mar hacen que la vista se pierda en el horizonte.
Tras otros 2,5 km de descenso, accedemos a este pueblo al que accedemos por otra rotonda, dirección a Fisterra.
Avanzamos por la linea de la costa hasta llegar a Fisterra. A partir de aquí continuamos por un bonito y estrecho trazado a muy poca velocidad ya que este suele ser lugar de tránsito habitual de peatones hasta llegar al Faro de Finisterre, otro lugar mágico pero lógicamente explotado turísticamente.
Es una lástima que en esta ruta no podamos ver la puesta de sol, ya que todavía nos esperan 100 km de ruta hasta llegar a Santiago de Compostela, pero nos tomamos nuestro tiempo para admirar la belleza de estos parajes con el Atlántico como protagonista.
Volvemos por la misma carretera que nos ha traído hasta aquí hasta llegar a la rotonda que nos marcaba la entrada a Fisterra para continuar ruta dirección a Corcubión.
Con el Atlántico todavía a la vista, comenzamos un ascenso de 1,5 km con su correspondiente descenso que nos adentrará en Cee, donde termina este tramo. Hay que prestar atención al cruce que nos marca el inicio de la AC-550, situado justo tras un semáforo y que no hemos tenido en cuenta en esta ruta, ya que el corto periodo que circulamemos por esta carretera, esta dentro de esta población.
Avanzamos a través de Cee y nuevamente hay que prestar mucha atención a el cruce que debemos tomar a la izquierda, y que por su estrechez, parece que nos lleva a un barrio del pueblo marcado por una cartel que indica dirección a As Campas sobre un pequeño letrero que indica a SANTIAGO, con la concha del famoso camino.
Pasado ya el Cabo de Finisterre, nos dirigiremos en general hacia el Este para alcanzar nuevamente la costa Mediterranea.
Durante los los primeros 6 km de los 10 que componen este tramo, nos acompaña el poco caudaloso Río de Bruxanes Das Pozas que se deja ver solamente un par de veces antes de perderlo de vista definitívamente.
En el PK 0, terminamos este tramo en una rotonda que posee el escudo del Concello de Dumbria y con con vistas a un parque eólico. En esta rotonda giramos a la derecha en la primera salida direccion Mazarico, Sta. Comba y Outes.
Con casi 400 km recorrido en el día de hoy y con ganas de llegar a Santiago de Compostela comenzamos este tramo de 27 km de longitud, circulando por un trazado recto en un constante y leve descenso, hasta que pasado O Pino del Val el descenso se vuelve más pronunciado y sinuoso con un paisaje cerrado poblado de árboles a ambos lados de la carretera.
Poco después llegamos a la localidad costera de A Serra de Outes.
Abandonamos A Serra de Outes dirección sur y en constante compañía de la Ría de Muros E Noia a la vez que nos despedimos del mar en general y del Atlántico en particular, con un hasta luego ya que volveremos a saludarlo dentro de unos días, ayá por Andalucía.
Tras 5 km, nos incorporamos a la CG-1.5. la primera de las vías que nos enfilará en linea recta hasta nuestro destino final del día.
Tras haber recorrido 400 kilómetros y ganas ya de bajarnos de la moto, circulamos por esta vía rápida, a pesar de haber podido circular por una via más secundaria que discurre paralela a esta. Tras 18 km sin curvas de relevancia, terminamos el tramo entrando en la AG-56, sin apenas darnos cuenta.
Aparte de leerlo en los carteles, notamos el cambio de vía por que esta, esta desdoblada y tiene dos carriles para cada sentido.
Aprovechando la rapidez de esta carretera, aceleramos sin pasarnos de los límites legales y tras 12 km prácticamente en linea recta, la abandonamos en la salida 1 dirección a Santiago, Milladoiro y Pontevedra.
Circulamos ahora por la SC-20, en estos últimos kilómetros de este último tramo que nos llevan a nuestro destino final: Santiago de Compostela.
No tenemos mucho tiempo de hacer turismo pero no nos iremos sin ver su famosa Catedral, destino de los miles de peregrinos que vienen hasta aquí siguiendo el Camino de Santiago.