Hoy tenemos casi 500 km por delante así que salimos de SORIA por una vía rápida buscando curvas, con el Mediterraneo como destino final.
Elegimos la N-234 para abandonar la capital soriana y nos dirigimos hacia el oeste. En un principio hay unas curvas abiertas pero enseguida abordamos una gran recta de 24 km, lo cual podemos aprovechar para calentar un poco el neumático.
Pasado el PK 322, tomamos un desvío dirección a Ágreda.
Tras una leve ascensión con una paella, nos incorporamos a la autonómica de tercer nivel CL-101 y cruzando la nacional anterior por un paso elevado para dirigirnos a terrenos más montañosos, dejando atrás las localidades de Jaray y Noviercas,
Con casi 50 km recorridos, abandonamos la CL-101 para incorporarnos a la SO-P-2126, autonómica de tercer nivel que en esta zona estan marcadas con color morado, dirección a Cueva de Ágreda y Beraton.
Los primeros kilómetros de este tramo los haremos en un trazado bastante recto con un asfalto en buen estado. Al fondo se ven las montañas por las que pasaremos en breve y esto empieza a tener buena pinta.
Al acceder a Cueva de Ágreda, hacemos un giro de 90º y continuamos por la misma carretera. A partir de aquí, el paisaje se vuelve más verda, y comenzamos a rodar por la parte sur oeste del Parque Natural del Moncayo.
A medida que avanzamos, el trazado tiene más y más curvas llegando a su colofón a 5 km del final del tramo, donde efectuamos un descenso muy curveado con un paisaje realmente bonito. Poco después abandonamos la provincia de Soria y comenzamos a rodar por la Comunidad de Aragón, concretamente por la provincia de Zaragoza.
En constante compañía del Río Isuela, nos introducimos de lleno en el Parque Natural del Moncayo por esta carretera de nomenclatura amarilla.
Rodamos por un valle siguiendo el cauce del río, que prácticamente no veremos, lo cual nos garantiza una serie de curvas, hasta que poco antes de llegar a Calcena, llegamos a un cruce donde debemos girar a la derecha en dirección a Oseja.
Comenzamos este tramo de 12 kilómetros y medio cruzando el río Isuela con la bonita vista de una peñas rocosas al frente mientras rodamos por un asfalto estrecho y en buen estado.
Las peñas nos acompañan en los primeros kilómetros y después el paisaje se abre pero las curvas siguen presentes a la vez que vamos ascendiendo hasta llegar a la parte más alta. La vista aquí es preciosa mientras comenzamos el descenso que nos llevará hasta Oseja tras rodar 9 km desde el principio de este tramo por un trazado con mucha visibilidad en las curvas debido en parte a la ausencia de árboles de gran tamaño.
Sin entrar en Oseja, continuamos 4 km más para llegar al stop que marca el final de este bien asfaltado tramo. Un cartel anclado a un pequeño edificio nos indica que Illueca esta a tan solo 9 km girando a la izquierda.
El asfalto se ensancha un poco ya que ahora circulamos por la A-1503, de nomenclatura verde.
Poco después de comenzar este tramo, una hilera de vegetación delata al río Aranda, que nos acompañará hasta Jarque, que cruzaremos por su casco urbano. Si eres un amante de los castillos, aquí tienes la oportunidad de visitar este, en estado de ruina y con una maravillosas vistas, como es habitual en este tipo de construcciones.
4 km después llegamos al final del tramo marcado por la población de Illueca, lugar de nacimiento del Papa Luna. En este punto, no debemos dejar pasar la oportunidad de visitar el majestuoso Castillo-Palacio del Papa Luna, que representa un icono del arte mudéjar en Aragón y que además es Punto de Sellado de La Ruta 47.
Con un sello más en nuestro pasaporte de La Ruta 47, dejamos atrás Illueca en dirección norte, por la A-1301, de también de autonómica de segundo nivel, estrecha y un poco peor asfaltada que la que nos trajo hasta Illueca.
La mitad de este tramo de 10 km, los recorreremos en una ascensión salvando un desnivel de 150 metros para comenzar el descenso de igual longitud y desnivel que nos llevará hasta la población de Tierga. Sin entrar en ella giramos 180 grados a la derecha incorporándonos a la A-2302 y comenzando a la vez un nuevo tramo.
Los próximos 25 kilómetros, los rodaremos por la amarilla A-2302 y tienen dos curiosidades dignas de ver y hacer una parada. La primera se encuentra en Mesones de Isuela, donde tienes un precioso y visitable castillo templario que además es uno de los de mayor superficie de Aragón.
La segunda, es la Plaza Ochavada de Chodes, barroca, poligonal de doce lados que no te dejará indiferente y que cruzamos por su centro.
Casi en el kilómetro 131 de ruta, llegamos a Morata de Jalón y tras pasar por un pequeño túnel bajo la A-2, llegamos a un cruce en forma de cruz. Nosotros giraremos a la izquierda.
Tras abandonar el Parque Natural del Moncayo, comenzamos ahora a rodar por la Zaragoza plana.
Los 7 km de este tramo, nos acercarán a La Almunia de Doña Godina. por un asfalto típico de una nacional.
Buscando la ciudad de Zaragoza, abandonamos La Almunia de Doña Godina por un asfalto bastante ancho y en muy buen estado.
El trazado de estos 44 km tampoco es muy curveado a pesar de que en todo momento, nos acompaña el Río Jalón. A vista de pájaro, se aprecia una amplia zona de regadío siguiendo el cauce del Río en medio de una zona mucho más amplia de secano.
Siguiendo esta zona frondosa, llegamos al final del tramo donde nos incorporaremos a la A-68.
Circulamos ahora por la A-68, a través de la cual cruzamos Zaragoza.
Con casi 300 km por delante, es un poco pronto para comer aquí, así que nos limitaremos a hacer una parada en la Plaza del Pilar, quizá lo más característico de esta ciudad, para disparar la correspondiente foto de recuerdo, junto a su basílica.
Tras la visita relámpago y en lugar de comida, algo a modo de almuerzo, volvemos a buscar la A-68, dirección a Castellón, para abandonarla poco después en la salida 230 dirección a La Cartuja y Torrecilla de Valmadrid.
Comenzamos este tramo de 36 km alejándonos cada veza más de Zaragoza. Se nota su cercanía por la anchura y trazado de esta vía que en un principio es muy ancha y con varias rotondas para evitar que los vehículos aceleren en exceso.
Fuera ya de las rotondas, el asfalto se estrecha un poco pero sigue siendo ancho, lo que nos permite circular rápido y acceder al final del tramo, situado en Puebla de Albortón, en apenas 25 minutos.
Hace rato que hemos dejado las montañas y llevamos tiempo rodando por paisaje más bien abierto. En este tramo se abre más todavía No hay ningún río cerca y se nota que toda esta zona es más desértica predominando el cultivo del cereal, que necesita menos agua.
Al fondo, se ven unas formaciones montañosas no muy elevadas y al llegar a ellas las bordeamos para al final llegar a una rotonda en la que cogeremos la tercera salida girando así a la izquierda.
Nos dirigimos ahora hacia Belchite por esta vía naranja, rápida y bien asfaltada, localidad a la que accedemos tras un par de largas rectas.
Aquí podemos hacer otra parada de 20 minutos. El pueblo Viejo de Belchite, conforma el campo de ruinas más grande dela guerra civil y se erige como un museo de recuerdos del pasado, constancia material de lo que conlleva una guerra.
Con el horror en la mente de lo que supone una guerra, abandonamos Belchite por la A-1307 y continuando por tierras mañas, llegamos a la N-232 tras rodar por una larga recta..
Abordamos durante un instante la N-232 para abandonarla tras solo 2 km de ruta en los cuales llegaremos a Azaila no sin antes cruzar el Río Aguasvivas.
Una vez pasada esta localidad, abandonamos esta nacional en un giro a la izquierda tras un stop, dirección a Vinaceite y Almochuel.
El 90% de este tramo es llano y recto, hasta que poco antes del final, nos acercamos al caudaloso Río Ebro que en ocasiones se intuye, a unos 700 m por la izquierda. Poco después y tras un descenso de pocas curvas llegamos a San Javier, donde terminamos el tramo.
3 km que rodaremos por esta vía naranja,ancha y bien asfaltada, nos separan de Escatrón, situado también junto al Ebro.
Ya estamos en el km 318 de ruta.
Abandonamos escatrón siguiendo de lejos el curveado cauce del Ebro, que salvamos por una carretera más bien recta y rápida cuando poco antes del final del tramo, cruzamos el Río Ebro allá donde se transforma en el Embalse de Caspe.
Pasado el PK 52 llegamos a un cruce en el que giraremos a la derecha en un ceda el paso dirección a Caspe, que ya se ve a unos pocos metros.
Una vez en esta bonita localidad zaragozana, nos adentraremos en el pueblo hasta llegar a la Plaza Mayor, donde podemos hacer una parada para sellar el pasaporte de la ruta en la oficina de turismo. Aparte de los atractivos turísticos de Caspe, no te puedes ir de aquí sin antes visitar la Torre de Salamanca, de gran belleza y estilo Neomedieval, construida en 1875.
Los 20 km es este tramo que discurre por la N-211 los haremos al lado del Embalse de Mequinenza.
Este es un tramo rápido ya que aunque seguimos la silueta del embalse, no lo hacemos fielmente, con lo que las curvas son más abiertas que lo habitual en este tipo de trazados.
El buen estado del asfalto y anchura del asfalto es una buena excusa para ir al límite, dentro de la legalidad y hacer unas tumbadas en zig zag.
Con 361 km recorridos, perdemos de vista al Ebro durante un rato, desviándonos a la derecha direccion a Nonaspe y Fayón.
Se nota la cercanía del Río Ebro en el paisaje de este tramo, que aún siendo muy abierto se pueden apreciar grandes extensiones sembradas sobre todo de pequeños árboles a ambos lados de la carretera.
Tras 7 km de curvas muy abiertas en zig zag unidas por rectas de longitud media, llegamos a un cruce en forma de T, donde giraremos a la izquierda dirección a Mequinenza.
Desde aquí ya se ven las formaciones montañosas a las que llegaremos en unos minutos por esta autonómica de segundo nivel.
El asfalto es más bien estrecho pero esta en muy buen estado, lo que unido a sus pocas curvas, hace que accedamos al siguiente tramo en apenas 6 minutos en un desvío a la derecha dirección a Fayón.
Abordamos ahora el tramo con el que despediremos a la provincia de Zaragoza, rodando por él durante 11 km.
El principio de tramo similar al anterior, por la comarca del Bajo Aragón, que es por donde circulamos ahora, se vuelve cada vez más curveado, cerrado y verde a medida que vamos haciendo kilómetros.
A un lado el Ebro que por estos lares se ha transformado en el Pantano de Ribaroja, y al otro lado el Río Matarraña que cruzaremos tras un descenso.A
Antes del puente, un cartel verde con letras blancas nos anuncia que vamos a entrar nuevamente en CATALUNYA., aunque esta vez lo haremos por Tarragona.
Con el cansancio acumulado de casi 400 km de moto, no nos suele gustar dejar los tramos de curvas para el final, pero consideramos que es peor alternativa circular por autovías o autopistas así que nos colocamos bien sobre el asiento y nos disponemos a recorrer este y el tramo siguiente por un trazado curveado siguiendo de cerca el cauce del Río Ebro.
Tras solo 5 km, de leve ascensión, llegamos a un stop donde giraremos a la izquierda dirección a Ribaroja d´ Ebre.
Con tres cuartas partes de la etapa de hoy recorrida, abordamos este divertido tramo en el que pasados 2 km no volveremos a ver una recta de 200 m hasta prácticamente el final.
Siempre con el Río Ebro presente, aunque lo veamos en contadas ocasiones, comenzamos un sinuoso ascenso de 8 km por buen asfalto y estrecha carretera para comenzar después su descenso correspondiente, también serpenteante, donde nos encontraremos nuevamente con el Río Ebro, junto la presa del Embalse de Ribaroja.
A partir de aquí, continuamos el cauce del Ebro, aunque en un trazado mucho más abierto y de amplias curvas, hasta que poco antes de Ribaroja D´Ebre, nos desviamos a la derecha dirección a Flix.
Dejamos atrás la población de Ribaroja D´Ebre mientras avanzamos hacia Flix por esta vía de color verde que por las características de su trazado podría ser más bien naranja.
Sus rectas y su anchura harán que lleguemos a Flix en apenas 5 minutos.
Ya en Flix, debemos girar a la derecha dirección Centro ciudad, para después enlazar con la C-12 en una rotonda en la que cogeremos la primera salida.
Parece que nos da pena despedirnos del Río Ebro, así que salimos de Flix en su compañía abordando los primeros kilómetros de esta carretera roja denominada C-12 y apodada Eje del Ebro en linea recta.
Llegamos a Ascó, donde se puede admirar la enorme chimenea de la Central Nuclear de Ascó, situada a orillas del Ebro, donde este adquiere forma de herradura. Ya son dos, las centrales nucleares que vemos en la Ruta 47.
Cruzamos el río por un puente y continuamos otros 3 km en línea recta, hasta que volvemos a encontrarnos con el Ebro, siguiendo muy de cerca su trazado, lo que nos garantiza curvas, aunque abiertas y verdes paisajes.
Pasamos junto a García y poco después accedemos a Morá la Nova, donde tras pasar bajo un puente de la N-420 nos incorporaremos a esta carretera dirección a Reus.
En un giro hacia el este, decimos "Hasta mañana" al Río Ebro continuando por esta nacional ancha y muy bien asfaltada.
Los primeros 16 km son llanos y con pocas curvas pero después atravesaremos una formación montañosa a través de la cual ascenderemos y descenderemos un par de veces. No es una vía autonómica pero cierto es que con mas de 400 km a la espalda, ya hay ganas de llegara Tarragona.
Tras 39 kilómetros de nacional, nos incorporamos a la T-11 dirección a Reus y Tarragona.
Como por todas las carreteras de este tipo, circulamos a velocidad de crucero con cuidado ya que estas vías suelen tener bastantes radares y finalizamos la etapa de hoy en un lugar cercano a la playa.
A ver si nos da tiempo a un bañito mediterráneo.